¿Cómo afecta la crisis a los arquitectos?
No llegan encargos, estudios de arquitectura cierran, muchos colegas emigran…
¿Adónde se van?
A China, Brasil, Alemania… Lo fatal es el 50% de paro juvenil, y que estudiantes y licenciados no tengan perspectivas aquí.
Y usted, ¿va resistiendo?
Con rehabilitación y proyectos como el parque temático en Sant Cebrià de Vallalta.
¿Qué virtudes convienen al arquitecto?
Diseñar espacios en los que a la gente le apetezca estar…, ¡aunque sea un tanatorio!, como uno que acabo de proyectar.
La parálisis constructiva ¿daña mucho?
Incrementa el desempleo, ¡el drama de nuestra economía! Construcción y turismo podrían levantarla: sólo si se reactiva el sector privado se reactivará el sector público.
¡Confiar en la construcción nos llevó a esta crisis!
No habrá ya especulación, ahora podemos reactivar la economía, tengo un proyecto que generaría empleo y riqueza. Porque si la Administración dedica sus energías sólo a recortar, ¡no creará riqueza!
Pero no hay dinero para construir.
Pero sí se puede aprobar un decreto que obligue a rehabilitar todos los edificios de viviendas existentes en Catalunya.
No sé si le entiendo.
O tomamos medidas drásticas o esto se hunde: ¡lo primordial es reducir el paro! Lo decía Napoleón: “Sólo la tranquilidad y el trabajo proporcionan felicidad”. Sí: el empleo es nuestro bien fundamental.
¿Y ponernos a rehabilitar viviendas crearía empleo?
Hay en Barcelona ciudad 86.700 edificios (¡y 25.830.000 en España!), casi todos con carencias en salubridad (malas ventilaciones, malos olores…), seguridad (fachadas y balconadas defectuosas…) y energía.
¿Energía?
Aplica placas fotovoltaicas y térmicas, suelos radiantes, aprovechamiento del agua de lluvia, cubiertas ajardinadas, instalaciones geotérmicas…, y cada edificio generará su propia energía: enorme ahorro nacional.
¿Dispone de datos al respecto?
Dinamarca es un ejemplo: si en 1970 el 85% de su energía dependía de la compra de petróleo, en el año 2050 será energéticamente autónoma, gracias a esas medidas, a las que conviene proporcionar ventajas fiscales.
Energía aparte, ¿todos los edificios necesitan alguna rehabilitación?
Sí. Los terrados están mal impermeabilizados y son caóticos, entre antenas, elementos metálicos a punto de caer a la calle, acondicionadores de aire mal colocados…
¿Tan mal los tenemos?
… bajantes sin ventilación, grietas y desconchados, barandas oxidadas, baldosas y tejas sueltas… Y mal aislamiento térmico, cables sueltos, aluminosis… Y los portales tienen accesos deficientes y no adaptados. Y hay cerramientos antiestéticos y peligrosos en azoteas, terrazas, balcones, obras ilegales…
¿Y cree que ahora es el momento idóneo para rehabilitar todo ese material?
Se ha construido demasiado en nuestro país: sobra vivienda, la tienen los bancos y no hay demanda de vivienda. Cierto. Pero sí podemos inspeccionar y mejorar la vivienda existente a lo largo de estos años venideros. ¡Eso arrancaría la economía!
¿Cómo sucedería eso?
Emplearía a trabajadores de todos los ramos de la construcción, y de rebote se llenarán restaurantes, bares, gasolineras…
Amparándose en la obligatoriedad, ¿no habría riesgo de precios inflados?
Según las zonas y por otros conceptos, los precios estarían bien tarifados por ley.
¿Y no hay riesgo de que se queden los encargos de las obras cuatro empresas?
Deberían adjudicarse a pequeñas empresas de cuatro trabajadores, uno de ellos aprendiz: ¡todos empresarios, todos a la obra!
¿Y de dónde saldrá el dinero para rehabilitar esos edificios?
Hay dinero, ¡naturalmente que lo hay! Entre particulares y bancos: se trata de hacerlo aflorar, y para eso serviría ese decreto.
¿Cómo sería recibida esta medida en las comunidades de vecinos?
Entenderían que esta norma mejorará su calidad de vida y revalorizará su patrimonio inmobiliario. Y, además, disponemos de fórmulas para escalar los pagos, descontarlos de la declaración de renta, IBI, fiscalidad diferida, legalizaciones…, y optimización y privatización de espacios comunitarios.
¿Y esto es todo, según su plan?
Los ayuntamientos tienen edificios y terrenos cuya titularidad o usos podrían privatizar, lo que reportaría ingresos a las arcas municipales, además de las legalizaciones.
¿Alguna otra iniciativa?
Sí, puedo sugerir otra: uso de la biomasa. Por ejemplo, aprovechamiento de los sarmientos de las viñas, que hoy se desechan: ¿sabe cuánto dinero proporcionarían?
Dígamelo.
Triturados y prensados para combustible, ¡nos ahorrarían 41 millones de euros, sólo en Catalunya! Estamos tirándolos cada año… Y, en España, ¡son 693 millones anuales!
¿De dónde más podemos sacar dinero?
De inversiones extranjeras, como la del famoso casino americano: veo que la Generalitat ya anda buscándole ubicación. ¡Buena señal! Significa que nuestra mentalidad cambia en el sentido de atraer la riqueza: a más inversiones foráneas, ¡más riqueza!
Proyecto
Me llega por diversas vías noticia de un proyecto de reactivación económica mediante el sector de la construcción, propuesta de un arquitecto barcelonés. Me pica la curiosidad y lo llamo. Y me explica su plan. Yo soy lego en urbanismo, arquitectura y economía, pero en estos tiempos críticos y desesperados ante el desempleo, prefiero no desdeñar propuesta alguna que pudiera sacudir el panorama: opto por recogerla. No sé calibrar si tienen mucho, poco o ningún sentido las ideas de este inquieto arquitecto: ¡doctores tienen los ayuntamientos y la administración autonómica! Ojalá no fuesen ocurrencias demasiado alocadas y resultase de alguna utilidad haberlas expuesto y compartido aquí…
He llegit la teva entrevista. Gàcies.
I vull dirte, que quan dius «No habrá especulación, ahora podemos reactivar la economía, etc.». Estàs equivocat, doncs les persones som devoradores de tot el que tenim a l’abast. Solament ens detè, el asgotament físic o psicològic. Però, quan ens recuperem tornem a lo de sempre: devorar-ho tot.
t’Adresse aquestos textos, per si vols llegirlos.
Amb afectge i carinyo.
Quiero decirte, que una de las soluciones para que se arregle la economíasería que el gobierno sacara el dinero de los ricos como el rey y sufamilia, los aristócratas, los Alberto, los Botín, las Koplowitz, Amancio Prada, Rafael Nadal, Julio Iglesias, Ronaldo y otros como él, la duquesa de Alba, Ruiz Mateos, Isidre Fainé, los políticos ricos que los hay, los cardenales, los obispos, los sacerdotes con todos los millones que les dan, etc.Y me dejo los que tú debes saber más que yo. ¿Lo hará? No lo hará porque el gobierno está al servicio de los ricos y poderosos. Por lo que esta crisis, como la anterior, como todas, la tienen que pagar los pobres. Solamente está por ver si los pobres aceptan el agravio que es solucionar la crisis en contra de ellos. Si no lo aceptan, ya sabemos que habrá revueltas y violencias, como ya sabemos que otras veces ha pasado. En tus manos también está el que no se digan mentiras y falsedades -que se dicen muchas- y atenerse a la realidad. Por ejemplo, si el rey sabía de la corrupción de su yerno y su hija, por qué nolo denunció. ¿Es que el rey también era cómplice de esas corrupciones e inmoralidades? ¿Te das cuenta dónde estamos? Cuantas más mentiras y falsedades, más irritabilidad, más odio e ira contra vosotros los ricos y poderosos.
La no-violencia se ha pregonado una y otra vez en política, en religión y por diferentes líderes. La no-violencia no es un hecho, tan sólo es una idea, una teoría, un montón de palabras; el hecho real es que somos violentos, es un hecho, es ‘lo que es’. Pero no somos capaces de comprender ‘lo que es’ y por eso, inventamos esa tontería que llamamos la no-violencia, lo cual genera un conflicto entre ‘lo que es’ y ‘lo que debería ser’. Mientras persigamos la no-violencia estaremos sembrando la semilla de la violencia; es algo tan obvio. Así pues, ¿podemos mirar juntos ‘lo que es’ sin evadirnos, sin ningún ideal, sin reprimirlo o escapar de ‘lo que es’?
Existen diferentes formas de violencia. ¿Debemos investigar cada tipo de violencia o abarcar toda la estructura de la violencia? ¿Debemos mirar todo el campo de la violencia o sólo una parte de ella?… La fuente de la violencia es el ‘yo’, el ego, el mí que se expresa a sí mismo de muchas maneras: en la división, en el tratar de convertirnos o ser alguien más, lo cual en sí mismo es una división del ‘yo’ y el ‘no yo’, del consciente y el inconsciente; el ‘yo’ que se identifica con la familia o la no familia, con la comunidad o la no comunidad, etc. Es como una piedra que arrojamos en un lago, las ondas se extienden y extienden, y el centro es el ‘yo’. Mientras el ‘yo’ exista en cualquiera de sus formas, sutil o abiertamente, habrá violencia.La violencia no sólo es matar a otro.
Hay violencia cuando uno emplea una palabra agresiva, cuando hace un gesto de desprecio a una persona, cuando obedece porque tiene miedo. De modo que la violencia no es sólo la matanza organizada en nombre de Dios, en nombre de la sociedad o del país, la violencia en mucho más sutil, más profunda, y estamos investigando la profundidad de la violencia en sí misma. Cuando dice que es indio, musulmán, cristiano, europeo o cualquier otra cosa, está siendo violento. ¿Sabe por qué es violento? Porque se está separando del resto de la humanidad. Cuando se separa a sí mismo por creencia, por nacionalismo, por tradición, eso genera violencia. Así pues, un hombre que quiere comprender la violencia no pertenece a ningún país, a ninguna religión, a ningún partido político o sistema, sino que se interesa en comprender a la humanidad. JKOnline
La guerra, es la violencia es su máxima expresión. Donde la destrucción y la muerte, también es a su máximo nivel. Ahora, hoy, los hombres, llamados los más civilizados, lanzan miles y miles de toneladas de bombas sobre un país, Libia.
¿Por qué hacen esto? Lo hacen por envidia, celos, odio y miedo, por expandir sus intereses, es decir, por egoísmo. La guerra, es la acción del «yo» de una manera desenfrenada y casi demente, justamente cuando el hombre contiene su máxima energía destructiva. Sabemos justificarlo todo; y, la guerra también la justificamos. Toda justificación es infinita, pero toda negación también lo es. ¿Qué podemos hacer para que los asesinatos en masa, que es la guerra no sea? Se pueden hacer muchas cosas, pero la principal es erradicar, primero que nada, la guerra que hay dentro de nosotros. Sino, qué sentido tiene todo lo que hagamos. Sería como intentar apagar un fuego, pero a la vez darle más combustible. Por tanto, descubramos qué es lo que da vida a esa guerra, que es tan nuestra, que la llevamos todos los días para el al combate. No esperes que alguien te solucione esa guerra que hay dentro de ti, pues las bombas siguen cayendo, destruyendo las personas y toda la vida.
Para que cese la violencia y la guerra. Mientras no haya un cambio en la moralidad, siempre habrá guerra. ¿Qué diferencia hay entre Obama y Bush? No hay ninguna, porque los dos tienen la misma moralidad. No tienen la sensibilidad desarrollada, para darse cuenta que los problemas no se solucionan con violencia, lanzando millones de bombas, haciendo la guerra. Su sensibilidad es, la del egoísmo, no importa a quiénes tenga que asesinar y destruir, la cuestión es que tienen que seguir con su vida inmoral, derrochadora y despilfarradora. Y, mientras no cambie de paradigma, la moral, seguirán asesinando a seres humanos inocentes y vulnerables. T. Segarra.
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