Víctor-M. Amela
Arranca el debate y Jordi Hereu sentencia: «Esta ciudad, ante esta crisis, no se ha quedado con los brazos cruzados». Y me fijo en sus brazos: antebrazo izquierdo acodado en la mesa, la mano derecha reposa encima. Trias: brazos cruzados sobre la sedosa corbata roja, apoyados en la mesa. Fernández Díaz: antebrazos sobre el filo de la mesa y codos fuera, de comensal educado. Gomà: acodado. Portabella: brazos cruzadísimos en cuanto el micrófono baja.Portabella es precisamente el más disciplinado ante ese micrófono retráctil: en cuanto lo ve bajar, calla; Fernández Díaz, el más indisciplinado: sigue hablando y hablando, aunque ya no se le oiga. A Trias le baja y se consterna. Hereu, el más rudo en la réplica: «No responderé a las tonterías del representante de la derecha» (Fernández Díaz, que se revuelve: «Tonterías son las que usted ha hecho», y cita ejemplos). ¡Huy! Pero, en general, el debate sale ordenado y bien sincopado.
Los candidatos denotan serenidad y papeles bien aprendidos. Trias lo tiene fácil: restregarle a los que «durante 30 años» han gobernado la ciudad todo lo que no han hecho. Fernández Díaz lo tiene fácil: más seguridad y caña a la bicicleta. Gomà lo tiene fácil: no al ocio de lujo del hotel Vela. Portabella lo tiene fácil: red ortogonal. Hereu lo tiene fácil: ciudad de barrios, pactamos por barrios.
Desgranan propuestas, tantas que diría que estamos a punto de vivir en la mejor ciudad del mundo. Quizá sí.
Prensa...
ELECCIONES 22 M | A punto de vivir en la mejor ciudad del mundo
11/05/11 por Victor Amela